Como bien es conocido, los Seres Humanos somos animales sociales, necesitamos intercambios sociales. Además y puesto que pasamos la mayor parte de nuestras vidas con otras personas, es importante aprender a entendernos con ellas y a desenvolvernos adecuadamente en las situaciones sociales, las Habilidades en esta área forman un nexo entre la persona y su ambiente. La posesión por parte de la persona de habilidades interpersonal adecuada, será fundamental para su buen funcionamiento. Desafortunadamente, el Entrenamiento en Habilidades Sociales no entra dentro de la programación académica, no se enseña en la escuela.
Una respuesta es competente desde el punto de vista social, cuando es apropiada para un individuo en una situación particular.
Estilos de respuestas:
Estilo Asertivo o socialmente hábil
Consiste en la expresión directa de los propios sentimientos, deseos, derechos legítimos y opiniones sin amenazar o castigar a los demás y sin violar los derechos de esas personas. La aserción implica respeto hacia unos mismo al expresar necesidades propias y defender los propios derechos y respeto hacia los derechos y necesidades de las otras personas. Las personas tienen que reconocer también cuáles son sus responsabilidades en esa situación y qué consecuencias resultan de la expresión de sus sentimientos.
La conducta asertiva no tiene siempre como resultado la ausencia de conflicto entre las dos partes; pero su objetivo es la potenciación de las consecuencias favorables y la minimización de las desfavorables.
Estilo Pasivo o Inhibido
Se trata de la trasgresión de los propios derechos al no ser capaz de expresar abiertamente sentimientos, pensamientos y opiniones o al expresarlos de una manera autoderrotista, con disculpas, con falta de confianza, por miedo a que los demás puedan no hacerle caso o hacerse una idea negativa de la persona. La no aserción muestra una falta de respeto hacia las propias necesidades. Su objetivo es el apaciguar a los demás y el evitar conflictos a toda costa. Comportarse de este modo en una situación, puede dar como resultado una serie de consecuencias no deseables tanto para la persona que está comportándose de manera no asertiva, como para la persona con la que está interactuando. Después de varias situaciones en las que un individuo ha sido no asertivo, es probable que termine por estallar (adoptando un estilo agresivo).
Otra cuestión importante a tener en cuenta, es la combinación entre este estilo y el Agresivo: Estilo Pasivo-Agresivo. Son personas, que aceptan la opción de los demás aun cuando están en contra una y otra vez, llegando a manifestar su parte agresiva en forma de “explosión” o descarga por todo lo acumulado (de repente estallan).
Estilo Agresivo
Consiste en la defensa de los derechos personales y expresión de los pensamientos, sentimientos y opiniones de una manera inapropiada e impositiva y que trasgrede los derechos de las otras personas. La conducta agresiva en una situación puede expresarse de manera directa o indirecta. La agresión verbal directa incluye ofensas verbales, insultos, amenazas y comentarios hostiles o humillantes, además de comentarios sarcásticos y rencorosos y murmuraciones maliciosas.. El componente no verbal puede incluir gestos hostiles o amenazantes, como esgrimir el puño o las miradas intensas e incluso los ataques físicos, además de gestos físicos realizados mientras la atención de la otra persona se dirige hacia otro lugar o actos físicos dirigidos hacia otras personas u objetos.
Otra forma agresiva consiste en boicotear una relación (de pareja, de trabajo, etc) a través de la conducta no verbal.
Fundamental concedernos el derecho a
- Errar.
- Decir No.
- Cambiar de opinión.
- Expresar emociones.
- Mostrar desacuerdo.
- Exigir por lo que se paga. ETC